jueves, junio 29, 2006

Tropecé de nuevo y con el mismo pie

Esta vez creo que es no son sólo imaginaciones, está por todos lados!!!… en el cine, en la universidad, el restaurante, la plaza… Dios! Cómo hay personas que pueden hacer tal cosa sin inmutarse siquiera???. Se las ve caminando muy tranquilamente, e incluso sonriendo en algunos momentos. Yo pensé que todo esto era ya prueba superada, pero no!!!!

Las personas son reincidentes, no le gusta mirar atrás para aprender un poco de los errores, prefieren cometerlo una y otra y otra vez… para años más tarde al observar una fotografía de aquella época preguntarse: “cómo es que yo usaba esas cosas?, cómo fue que me pasó por la mente?, en qué momento decidí darle la oportunidad?...” Mi recomendación es que se fijen bien en las cosas que les ofrecen, que les presentan, sobre todo en las grandes vitrinas…

La moda de los 80 está emergiendo por todos lados… al principio no lo creía, pero basta con salir a la calle. Ya en cualquier esquina se puede encontrar: los pantalones mezclilla apretaditos hasta la rodilla y luego el “ruedo” doblado hacia arriba, cinturones que más bien parecen fajas de Jack Veneno, aretes de súper grandes y coloridos en forma de flores, estrellas, rayos, patinetas y cuantas cosas más se les ocurra a cualquiera.

Es cierto que aún no nos ha invadido 100%, pero creo falta poco para toparnos con horrorosas vestimentas prelavadas o nevadas, pantalones mata-tobillos (pues lo aprietan como queriéndolos ahorcar), peinados suuuuuper estrafalarios, maquillaje al estilo Guason, las minis con tres vuelos, y aquella mallas o medias de nylon de todas las formas y colores… verdaderamente no sé cómo hay personas que usan ese tipo de cosas.
Ustedes verán, al final vamos a tener que cantar casi como Julio Iglesias
“Tropecé de nuevo y con la misma piedra
en cuestión de modas nunca aprenderé
yo que había jurado no jugar con ella
tropecé de nuevo y con el mismo pie”

jueves, junio 22, 2006

Una Filosofía Para Vivir

Sólo algo para compartir :)

Ser tan fuerte que nada pueda perturbar la paz de tu mente.
Hablar a todos de salud, felicidad y prosperidad.
Hacer que los demás sientan siempre que hay algo bueno en ellos.
Mirar siempre el lado luminoso de las cosas y hacer que tu optimismo se realice.
Pensar sólo en lo mejor y esperar sólo lo mejor.
Ser tan entusiasta del éxito de tu amigo como del tuyo propio.
Olvidar los errores del pasado y luchar por las grandes consecuencias del futuro.
Sonreír siempre y que tu sonrisa sea para todos.
Dedicar tanto tiempo a tu adelanto personal que no te quede momento para encontrar un defecto en los demás.
Ser suficientemente tolerante, firme y generoso para combatir la pesadumbre, la pasión y el miedo y suficientemente feliz par no permitir la presencia de la inquietud.

domingo, junio 18, 2006

Ni tu ni yo sabremos por qué

Una vez y otra vez y otra vez…
A qué le temes pequeño misántropo?
no, respuesta equivocada, no me temas a mí…

yo, excesivamente herida para herirte
y demasiada culpable también
no puedo más que mirarte y mirarte
y que me mires otra vez…? Tal vez

Tú, excesivamente orgulloso para amarme
y demasiado temeroso de la verdad
no puedes más que huirme y huirme
y si te busco otra vez…? Jamás!!!

Unas veces me tuviste
pero fueron muchas más las que te perdí
cansada de mirarte y que me mires
cansada de mirarte y que voltees

te dejo en tu noche sombría
para que regreses
una vez
y otra vez
y otra vez

lunes, junio 12, 2006

Entrevista en TV

Este sábado estaba dándole una oportunidad a la TV de que me mostrara algo interesante, pasando los canales vi una entrevista a la comunicadora Zoila Luna.

A leguas se nota que es una mujer súper liberal y moderna, algo que pocas a su edad (pasados los cuarenta, como ella misma expresó) se toman el derecho de serlo. Ella es divorciada y tiene dos hijas, no se las edades exactas, pero una ya pasó de los 20.

Entre las cosas que dijo, algunas me llamaron atención. Ella quería encontrar un hombre que sea sincero, honesto, que la quiera mucho bla, bla, bla… Cuando el entrevistador le dice: “y que quiera a tus dos hijas…” ella rápidamente contesta:
ELLA :No señor, no es a ellas que tiene que querer, es a mí
EL :Zoila, que quiera a tus hijas también…
ELLA :que no!, que me quiera a mí, no a ellas, a mí.

No les oculto que quedé como en shock, y sólo pensé “qué disparate tan grande esta diciendo esta mujer, nadie nunca hablaría de esa forma”. Y es que eso es lo que estamos acostumbrados a escuchar de las madres divorciadas:
“Si me vuelvo a casar, mi pareja debe querer a mis hijos tanto como a mí”
“No puedo ponerles un padre a mis hijos que a ellos no les agrade”
“Prefiero quedarme sola, mis hijos son muy celosos conmigo”

Entonces dentro del estado que me encontraba, escuché que dijo “y qué crees tú? Que ellas no se casarán con alguien porque no me quiera a mí, que ellas le dirán: tú no quieres a mami, yo no puedo casarme contigo. No, los hijos se casan con quien ellos quieran aunque a los padres nos guste o no”. Al escuchar esto entonces fue que pude pestañar, cerrar la boca, continuar respirando y salir de mi estado de asombro… y entonces me pareció tan lógico lo que decía…

Me puse a pensar y me di cuenta que muchas mujeres deberían pensar de esa forma y serían un poco más felices, aunque reconozco que no aplica para todos los casos, pues si los hijos aún son niños no es saludable que uno de sus tutores no sienta aprecio por ellos. Si una madre soltera, encuentra un compañero que la ame es una bendición (y esto aplica para cualquier mujer sea madre o no) y si ese hombre también quiere a sus hijos, o por lo menos está dispuesto a dejar crecer ese sentimiento en él, es bendición doble!!! Pero deberían renunciar las madres solteras a la felicidad al lado de su pareja por sus hijos, que dentro de unos poco años ya no estarán en casa???